Si estarás en Lisboa por pocas horas o solo un día, te damos un excelente itinerario para que disfrutes de algunas de las maravillas lisboetas en muy poco tiempo.
NOTA: Si no te gusta caminar ¡mejor no leas este artículo!
Toma un café en el centro de Lisboa
Vamos a comenzar en el centro de Lisboa, específicamente en la Plaza de Rossio. Una de las plazas más especiales, con su calzada fotogénica y las fuentes. Tienes una vista desde aquí abajo del Convento do Carmo.
Si te apetece una pausa con un delicioso café portugués, te dejamos info. para saber cuál pedir, puedes leer nuestro post sobre cómo pedir un café em Lisboa.
También puedes probar un trago de ginjinha allí mismo en el centro, junto a la Plaza de Rossio, una de las cosas más típicas de la ciudad ¡una dulzura de licor!.

Recorre la Baixa de Lisboa
Luego te recomendamos que entres en la Rua Augusta, la principal calle peatonal de Lisboa, con comercio y restaurantes. Presta atención para que no te pierdas el Elevador de Santa Justa, una preciosa estructura de acero creada en 1902.
Al final de la Rua Augusta, llegas a la preciosa y amplia Praça do Comércio, rodeadas de importantes edificios de gobierno, terrazas y el río Tajo. Desde aquí tienes una bonita vista del Castillo de San Jorge.

Después de ver este enorme espacio a cielo abierto, puedes continuar a pie hasta la Catedral da «Sé» de Lisboa, y rodearla por la izquierda, siguiendo la línea del tranvía hasta llegar al mirador de Santa Luzia.

Visita Alfama
El siguiente paso será perderte en el laberinto secular que es la Alfama, el barrio más célebre de Lisboa, sin duda histórico y aún en pie, a pesar del violentísimo terremoto y tsunami que arrasó con la ciudad en 1755.

Es un lugar para perderse, no hay una regla general sino caminar, y aventurarse por las minúsculas calles del barrio. En cada esquina una historia donde no sabes qué podrás encontrar. Puedes ver desde restaurantes gourmet a casas de fados típicas y pequeñísimas. Es el lugar para escuchar el mejor fado de Lisboa.
Ya que estás por aquí, puedes pasas por el Panteón Nacional. Y si es martes o sábado por la mañana, también puedes ir a la Feira da Ladra, el mercadillo lisboeta más popular.

Desde Alfama puedes subir hasta el vecino barrio de Graça, con encanto de ambiente local y miradores, o entonces bajar en dirección al río para tomar el metro en la estación de Santa Apolónia y volver a la zona del centro, estación Baixa/Chiado, para recorre el barrio de Chiado. Justo al lado se encuentra Barrio Alto.

También podrías regresar a la Baixa desde Graça o Alfama usando el mítico Tranvía 28 de Lisboa.
Sin duda hay mucho por descubrir en Lisboa y el «qué ver» sigue siendo un asunto muy subjetivo. Si quieres un tour especializado, te recomendamos una visita guiada.
Llega al centro de Lisboa desde el Aeropuerto
Asumiendo que llegas y partes en avión, una de las mejores opciones para moverse entre la ciudad y el Aeropuerto de Lisboa es el AeroBus. Sale cada 20 minutos y el tickets cuesta 3,50€ y es válido por 24 horas en ambos sentidos y en todas las paradas que hace el Aerobus en sus trayecto desde el aeropuerto hacia el centro, con varias paradas interesantes para el visitante. El primero sale a las 07h00 y el último a las 23h00 desde el Aeropuerto hasta el centro. En el sentido inverso, saliendo de Cais do Sodré, funciona de las 7h45 a las 22h30.
Una vez que tomas el Aerobus, si no piensas dormir en Lisboa y quieres comenzar este recorrido que te recomendamos, bájate en la Plaza Restauradores. Esta plazoleta se caracteriza por su obelisco central, rodeado de comercios (tiendas, cafés, restaurantes, etc.) y está situado en uno de los extremos de la Avenida Da Liberdade, junto a la Plaza de Rossio (donde comienza el recorrido de este post).
También puedes tomar el metro. O incluso un Uber. Puedes ver más opciones en nuestra página de transportes en Lisboa.
Si prefieres ahorrarte todos los pasos antes mencionados, o si tu horario de llegada no coincide con los del autobús, contrata un traslado desde el aeropuerto de Lisboa al centro o hasta tu hotel.